10 de septiembre de 2010

Mitad mejor que una

Ayer me comi la mejor hamburguesa del mudo. Me supo a gloria, de hecho solo me pude comer la mitad de una deliciosa hamburguesa tipo, de uno de esos establecimientos de fast food, que el único rápido es mi niño, porque tus 10 min espera no te los quita nadie.

Bueno volviendo a la deliciosa hamburguesa, después de la cola, recordarles que era para llevar y de que tu hijo se comiera la suya, antes de que llegara al primer semáforo; no creáis que era una happy de esas de medio bocado, no, para nada; este se come una Jr y después claro esta la de su padre, y solo tiene cuatro años. Y el pequeño, je...je,  ese se come la de su hermano, el pan de la de su padre y chupa el papel del envoltorio.

La cuestión es que esa media hamburguesa, porque la otra se la come tu enano que te mira con carita de, es que tengo más hambre, como si no hubiera comido en su vida, me supo como ninguna, nunca antes me había saciado tanto una pequeña porción. Era feliz, disfrutando del disfrute, esperando a que después de la cena me pidiera: y ahora la leche, verdad papa


No se que van a dejar para la pubertad. De momento se que si quiero cenar hamburguesa, pido la doble, completa, tres de ketchup, patatas fritas y batido. Y si por un casual, tu mujer te dice: no para los peques compra los happy, la grande es una exageración, aún son muy pequeños. No le pienso hacer ni caso. Si quiere ella comerse una ensaladilla, adelante, pero yo quiero cumplir con ese famoso dicho: Cuando seas padres comerás huevos. Porque aun no he visto eso de los huevos.

Y para los padres noveles, si tenéis dos niños, y son de comer como los míos, un consejo: ir invirtiendo para comprar una vaca por lo de la leche. Por que con el tema de la carne yo lo que hago es; meterlos en una habitación lanzar una gallina viva, por supuesto, y que se cumpla la ley del más fuerte.

Donde guardamos la vaca en una casa como la mia, ya os lo contaré otro día.