17 de mayo de 2010

Malas o buenas

Que verdad es, que todo depende del color del cristal con que se mira, como dice un proverbio tailandés.

Son muchos los días que nadie te dice nada de tu trabajo, o incluso te lo tiran por tierra, aunque estos la verdad, son pocos.

Al caer la noche, haces balance. Te preguntas si a caso es uno, o son tus fotos, o la imagen que tomaste no fue la acertada, o fallaste en la edición… mil cosas.

Pero después de una breve reflexión, y haber comentado con los que te aprecian, la línea a seguir siempre se hace más clara.

Da igual lo que digan o no digan, yo lo tengo claro, reconocer los fallos, mejorar día a día y seguir luchando, a pesar de las gafas que lleven el resto; las mías creo llevarlas graduadas.

Y al cabo de unos días ese cristal con que te miran cambia de color, y lo que ayer fue marrón hoy es de un rojo intenso, y te llaman para felicitarte por el trabajo realizado. Y joder cuando ocurre eso, que se vayan a to……………, y te acuerdas de los que te han ayudado.

Por esos, felicidades por un trabajo excepcional, va por ti Jorge, eres un profesional y un fotógrafo como pocos.